OBESIDAD Y SOBREPESO EN EL NIÑO
Las causas del incremento de este problema en la población, son variadas y contemplan factores hereditarios (los menos), hábitos alimentarios y de ejercicio físico. Analicemos cada uno de ellos. Como lo mencione, es poco común encontrar en la población en general, enfermedades que conduzcan a obesidad y sobrepeso. Son mucho más frecuentes los problemas que se desarrollan por malos hábitos de alimentación, vale la pena ahondar en este concepto. Es frecuente que este grupo de niños se vallan a al escuela por las mañanas sin desayunar, las mamas entonces les dan un licuado hecho con leche, fruta, cereal y azúcar, pensando que es sano, para el recreo, les ponen una colación o lunch, que esta cargada de azucares (jugos, cereales, pan), dejando pasar la oportunidad de ofrecer un alimento balanceado, para que tengan energía para la parte más importante del día. Por la tarde, después de comer, se sientan y comen golosinas o frituras y refrescos embotellados que proporcionan una gran cantidad de calorías. Estas cantidades extras de calorías se convierten en grasa que se almacena en su cuerpo.
Por otro lado, cada vez más los niños no hacen ejercicio, por la tarde se sientan a jugar video juegos, a consultar Internet o a ver novelas, lo que crea un desbalance entre el consumo de energía y lo que se gasta, propiciando que se acumule más grasa y por lo tanto aumentar de peso.
Se sabe en la actualidad que los niños obesos, tienen alto el colesterol y los triglicéridos, lo que aumenta el riesgo de padecer enfermedades del corazón en edades tempranas. También aumenta el riesgo de padecer diabetes en la etapa de la adolescencia. Así como lesiones en el hígado, huesos y articulaciones.
Como verán, no es solamente estar gordito, sino que el riesgo a padecer enfermedades graves es importante.
Los adultos de la casa deberán, ofrecer alimentación balanceada en tres tiempos durante el día, no permitir el consumo de alimentos con alto contenido de azucares y grasas y sobretodo crear el habito del ejercicio, no permitiendo el uso de videojuegos, Internet o ver la televisión durante tiempos prolongados