INTOXICACIÓN Y CONSUMO DE SUBSTANCIAS PELIGROSAS
Estando de guardia en un servicio de urgencias pediátricas, el médico se enfrenta a problemas usualmente graves, uno de ellos es al consumo de medicamentos o substancias toxicas en los niños, las madres mencionan que se descuidaron un momentito y el niño los ingirió. Para el médico que lo atiende es un reto poder recuperar la salud de estos niños, así como frustrante ver como un niño esta grave por falta de cuidado.
Los niños por naturaleza son curiosos y que identifique las pastillas o tabletas que consume el adulto, como dulces, ya que son de colores y aunque el sabor comúnmente es desagradable, precisamente para evitar que el niño lo consuma, si se llevan a la boca una cantidad importante de estos medicamentos lo que llegan a tragar a pesar de que escupan una parte, sería suficiente para intoxicarse, ya que el peso del niño es mucho menor a el de un adulto y basta con poco medicamento para causar problemas. Cuando se identifique que el niño consumió medicamentos, se debe en primer lugar tomar el medicamento que tomo, para que pueda mostrarlo al médico de urgencias y en segundo lugar llevarlo al hospital más cercano para su atención. No intente hacerlo vomitar, seguramente al llegar al hospital le harán un lavado gástrico si es que se debe hacer, ya que existen medicamentos que por su agresividad no es conveniente que los vomiten. Comúnmente si el familiar se da cuenta de lo que paso y recibe una atención médica pronta y adecuada el cuadro puede ser controlado.
Sin embargo existe desgraciadamente, en forma frecuente, la ingestión de sosa cáustica y otro líquidos que sirven para la limpieza de la casa, ya que se almacena en envases de refrescos o se dejan al alcance del niño, esta sustancia quema la boca, el esófago y el estomago dejando lesiones de por vida en el individuo, la mayoría de las veces con curaciones dolorosas durante muchos años y además recibir la alimentación por una sonda a estomago, en el mejor de los casos, con el tiempo se pueden restaurar las partes antes mencionadas, aunque en ocasiones la quemadura fue tan grave que las lesiones se quedan de por vida.
Si sospecha que su niño tomo sosa cáustica o algún otro liquido usado para la limpieza de la casa, no lo haga vomitar, ya que se producirían más quemaduras, llévelo a un hospital de inmediato.
Las medidas preventivas son muy simples, nunca deje al alcance de los niños medicamentos o substancias toxicas, guárdelas con llave y nunca se distraiga.